La Administración Nacional de Educación Pública y Unicef promovieron el Seminario “Cuidar los sueños: Experiencias y estudios sobre la asistencia escolar”, con el cometido de propiciar la reflexión sobre el ausentismo, difundir investigaciones relacionadas con la temática y de ensayar posibles respuestas a la problemática.
Al inicio del Seminario, el presidente de la ANEP, Pablo Caggiani, sostuvo que para abatir el ausentismo es necesario continuar trabajando de manera interinstitucional, ya que se trata de un fenómeno multicausal que también requiere de micro acciones desarrolladas al interior de los centros educativos.
“Esto implica una perspectiva de la política pública y del derecho a la educación y de cuáles son las obligaciones de quienes administramos. La primera es que hay que tomar decisiones basadas en la evidencia y hay que tomar decisiones junto a otros. Cuando un barrio está complicado, los gurises no van a clase. Así que hay que evaluar y monitorear lo que sucede y tomar decisiones con otros”, afirmó.

Con respecto a la amplitud de causas que inciden en las inasistencias, ejemplificó que en ocasiones algo tan asimilado como exigir un código de vestimenta en los centros educativos, puede desestimular a algunos jóvenes a asistir por no cumplir con la normativa.
El director sectorial de Planificación Educativa de la ANEP, Andrés Peri, indicó que combatir el ausentismo, “es un partido largo que jugamos, que requiere acciones concatenadas para trabajar con un problema multicausal que es difícil de abordar”.
El representante de UNICEF en Uruguay, Francisco Benavides, valoró que la problemática: “Ciertamente requiere de un aliento de largo plazo. El ausentismo es como un mal silencioso, todos sabemos que está, pero de alguna manera se acepta como algo que sucede y poco a poco su impacto se ve a largo plazo”.

Ausentismo en Uruguay
En esta oportunidad, el coordinador del Departamento de Investigación y Estadística de ANEP, Santiago Cardozo, expuso acerca de la asistencia a clase en Uruguay, a partir de las investigaciones educativas.
“Todos sabemos que el ausentismo es un problema estructural y generalizado. Los niveles de faltas son elevados en promedio y la asistencia es altamente heterogénea, es decir que la cantidad de clases a las que está expuesto un alumno con buena asistencia en el Uruguay y su compañero que falta problemáticamente, es enorme”, explicó.
Con respecto a los niveles educativos más afectados por esta problemática, dio cuenta que se trata de una realidad transversal a todos los niveles educativos, por eso su carácter estructural. No obstante, es más acentuada en educación Inicial y en Media Básica.
Además, señaló que en los últimos años se evidenció un incremento leve en el ausentismo en todos los niveles y modalidades educativas, que posiblemente haya empeorado luego de la pandemia.
Cardozo también planteó que en educación Media, las estimaciones de inasistencia muchas veces enmascaran situaciones de desvinculación, ya que la asistencia se sigue registrando aunque el estudiante abandone sus estudios.
Si bien las faltas afectan principalmente a los estudiantes socioeconómicamente más vulnerables, el promedio es alto en toda la población. No obstante, los estudiantes académicamente más vulnerables, por ejemplo alumnos con al menos un año de extraedad, también tienden a ausentarse más.
“También existen señales de que las inasistencias podrían estar afectadas por la percepción de problemas de convivencia, como la violencia, seguridad y acoso en la educación Media”, afirmó.

Nuevos desafíos
El oficial de Educación de Unicef, Alejandro Retamoso, centró su presentación en los principales estudios sobre la temática, realizados en las últimas dos décadas principalmente por el organismo internacional y, sobre todo, en los últimos 4 o 5 años, con un enfoque cualitativo a través de entrevistas grupales con familias, docentes y estudiantes.
“Identificamos algunos desafíos nuevos en el tema del ausentismo, porque sus características han variado en los últimos años. La pandemia claramente fue un punto de quiebre en el aumento de las inasistencias, pero también florecieron nuevas causas”, explicó.
Retamoso realizó un minucioso repaso a los diferentes aspectos del ausentismo. Por un lado, sostuvo que existe una baja valoración de la educación por parte de algunas familias que no logran transmitir la importancia de asistir a clase, especialmente cuando no perciben resultados inmediatos.
Las familias, docentes y estudiantes también dan cuenta de que enfrentan dificultades para establecer límites y rutinas. La falta de hábitos de sueño saludables se traduce en frecuentes inasistencias, especialmente a primera hora.
Asimismo, muchas madres y padres, sobre todo de adolescentes, reconocen que les cuesta regular el uso del celular de sus hijos, los horarios de sueño o establecer rutinas de estudio.
Otro de los aspectos mencionados por Retamoso, refiere a los desafíos en el acompañamiento cotidiano de los hijos que atraviesan muchas de las familias. Largas jornadas y compromisos laborales, a muchos les impiden seguir de cerca la trayectoria educativa.
Además, operan dinámicas familiares en las que los adolescentes asumen responsabilidades de cuidado de otros familiares. Otro de los aspectos resaltados, es la preocupación por las situaciones de seguridad en los traslados y en los entornos barriales.
Por otro lado, la subestimación de las faltas, la desmotivación frente a las prácticas pedagógicas y la sensación de desconexión con la institución y falta de seguimiento, son otras de las características que acompañan al ausentismo.
Los factores institucionales y de organización escolar adversos, también tienen un correlato en las inasistencias, así como el malestar emocional, la falta de contención y los problemas de salud.

Estrategias
La mesa “Estrategias de promoción de la asistencia escolar en Chile y Uruguay” contó con la participación de Paula Bustos, coordinadora Nacional del área de Trayectorias Educativas del Ministerio de Educación de Chile, quien presentó “Chile Presente”, una política de protección de trayectorias educativas que aborda la asistencia y la permanencia escolar desde un enfoque integral.
Esta plataforma innovadora permite monitorear en tiempo real la asistencia y emitir alertas tempranas, brindando información fundamental para la gestión y la toma de decisiones de docentes, directores y autoridades.
Durante su intervención, Andrés Peri dio cuenta de las políticas desplegadas por la ANEP para atacar el ausentismo, entre las que destacó las estrategias pedagógicas y de acompañamiento educativo, de protección socioeducativa en los territorios y de sensibilización y concientización, además del mejoramiento de los sistemas de información, comunicación y alerta temprana.
Además, anunció cuáles serán los próximos pasos. “Trabajaremos sobre la forma en que se visualiza la asistencia en los sistemas de reporte de los docentes y las familias, para poder dimensionar la cantidad de inasistencias y su gravedad a medida que transcurre el año lectivo”.
Por otro lado, indicó que a partir del próximo año se distribuirán en los centros educativos materiales de apoyo a la campaña de asistencia y se realizará un monitoreo regular de la asistencia. También informó que se continuará priorizando la asistencia durante todo el período de gestión.

Buenas prácticas e intervenciones
En la mesa de experiencias pedagógicas a cargo de centros educativos: “¿Qué acciones se están implementando para mejorar la asistencia?”, representantes del Liceo Nº 5 de Tacuarembó, CEA 183 de Montevideo y de la Escuela Nº 157 de Las Piedras compartieron estrategias creativas para mejorar la asistencia y fortalecer los vínculos con las familias. Carmen Rodríguez y Carla Conteri fueron las encargadas de moderar este espacio de intercambio.
Guillermina Suárez y Lucía Villar del Laboratorio de Ciencias Comportamentales de Ceibal, presentaron dos intervenciones realizadas en educación Primaria y Media, orientadas a reducir las inasistencias.
“En el laboratorio diseñamos, implementamos y evaluamos soluciones basadas en las ciencias del comportamiento, para generar evidencia que contribuya a mejorar políticas y prácticas educativas”, explicaron.
Suárez expuso cómo se desarrolló la intervención en Primaria, diseñada para contrarrestar la realidad de ausentismo crónico evidenciada en 2022, que afectó a 7 de cada 10 estudiantes.
La acción incluyó el diseño de un programa comunicacional con el cometido de dar visibilidad y generar conciencia, brindando información a las familias y a los docentes, a través del envío de una carta, un calendario para registrar las asistencias e inasistencias y un folleto que hacía énfasis en la importancia de no faltar a clase.
Los docentes recibieron un mensaje por whatsapp, informándoles cuáles eran los estudiantes que estaban en riesgo y ofreciéndoles ayuda en caso de solicitarla.
“La intervención logró una reducción de las inasistencias en un 6%, 1.7 faltas en promedio”, indicó.
Por su parte, Villar relató cómo fue la experiencia desarrollada en Secundaria para mejorar el egreso. La estrategia incluyó el envío de mensajes breves y personalizados por whatsapp a familias de estudiantes de séptimo de educación Media Básica con información educativa relevante. La iniciativa fue muy bien recibida por las familias y contribuyó a reducir la brecha informacional entre el liceo y las familias.
El cierre de la jornada estuvo a cargo de Antonio Romano, director ejecutivo de Políticas Educativas de ANEP, quien afirmó que la política educativa enfrenta nuevos desafíos.
“No alcanza solamente con la sanción, con la prohibición, sino que los desafíos consisten en generar nuevas estrategias para garantizar que el cumplimiento del derecho pueda realizarse. Esto nos interpela, porque por ejemplo nos obliga a revisar algunas resoluciones y reglamentaciones. Durante todo el siglo XX, si los estudiantes superaban cierto nivel de inasistencias, perdían el año. La pregunta hoy es si efectivamente esos recursos que los sistemas habían desarrollado son suficientes para que esto ocurra. Y no lo están siendo y tenemos que ser creativos”, consideró.
En la tarde, equipos técnicos y docentes participaron en una instancia de co-diseño con actores educativos para seguir produciendo materiales de apoyo y propuestas de mejora de la asistencia para el trabajo en los centros educativos de todo el país.
Campaña “No faltar hoy, es una oportunidad para mañana”
Más información: asistencia.anep.edu.uy